En esta cinta nominada a diez premios Oscar, Yorgos Lanthimos hace una adaptación muy libre de hechos históricos, en particular las intrigas cortesanas durante el reinado de Ana de Gran Bretaña. Aunque se trata de una película más accesible que otras de su carrera, el director griego conserva, en su retrato del absurdo de la vida cortesana, una visión pesimista de la naturaleza humana, a la vez que profana las convenciones del subgénero cinematográfico de reyes y cortesanos.
